Casi llega la navidad, tiempo de amor y paz, de pasar inventario, de poner las cosas en una balanza, y aunque no lo crean, dentro de las cosas que tenemos a veces de depurar y valorar están los amigos.
Es tiempo de tomar en cuenta a cuáles les diste tu amistad incondicional y sincera durante todo el año, y no te pagaron con la misma moneda, si sólo las cosas funcionaron en una sola dirección, ten cuidado, pues realmente los afectos deben ser en doble vía.
También hay que revisar a aquellos que no tomaron con seriedad algunas cosas que eran importantes para ti , pero que dependían de ellos ,y con eso te perjudicaron, con esa actitud te demostraron que para ellos,eres una persona cualquiera, nada especial.
Si tienes a una o más de una persona en esta situación, quizás es tiempo de que empieces a cambiar la palabra amigo, por algunas de las frases siguientes:
-Persona conocida…
-Alguien a quien aprecio…
-Alguien a quien agradezco…
-Alguien muy amable…
Pero sí debemos pensar, madurar y cuestionarnos muy bien, antes de usar esa palabra bella, sinónimo de magia, seriedad, preocupación por el otro y entrega absoluta…¿AMIGO?... !AMIGO!
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