Siempre he manifestado la gran predilección que siento por
los refranes, ellos encierran siempre
una gran verdad.
En los últimos días me he manejado con una persona que parece la
inspiración para este refrán.
Siempre vive buscando excusas para aplazar los trabajos, y a pesar de
ser excelente, da mil vueltas para resolver los problemas.
Si está nublado, afirma que como está el día, así se siente él, y si el sol está muy radiante, dice que tiene
que esperar que baje su potencia para poder trabajar, como si tuviera en
su interior un servicio de meteorología.
Cuando oí este discurso pronunciado por
él como si fuera algo normal, no me pude contener y le pregunté la edad,
cuando me la dijo, me quedé en shock al pensar, que cómo es posible que una persona tan joven y
con muchos hijos, pueda actuar de esa forma.
En tono de burla le dije: Mi hijo, pero entonces, en tiempo en que hay
tormenta y un sol esplendoroso, los trabajos se jodieron…Y el muy cínico
simplemente se encogió de hombros...Vaya
personaje!
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