Hay algunas personas que me gustaría que fueran hechas de un material que pudiera ser borrado, para desaparecerlas de mi vista…
Me refiero a aquellas que se pasan la vida entera hablando de dietas y calorías, y se hacen la vida imposible y se la hacen a los demás.
Soy una persona a quien le gusta cuidarse, como bajo de sal, muy poca grasa, ceno ligero, hago ejercicios, pero de vez en cuando me aloco, me salgo de la dieta, disfruto y durante lo hago, no menciona esa palabra que tanto odio: CALORIAS, CALORIAS…MALDITAS CALORIAS, uf, estoy harta!
Estoy convencida totalmente de que hay que cuidarse, pero también hay que vivir, pero vivir a plenitud, todo puede tener un equilibrio.
Una noche le hice una confesión a mi marido, y luego me di cuenta por la expresión de su rostro que a él también le pasa lo mismo:Como nosotros hacemos caminata en horas de la mañana, le conté lo feliz que me pongo cuando empieza a llover antes de salir a caminar, porque inconscientemente encuentro un pretexto para quedarme en cama acostada una hora más, aunque él es muy serio, sonrió con picardía.
Es bueno que sepamos, que hablar siempre de dietas y calorías satura a las personas que comen cosas normales, no se imaginan la rabia que le da una persona cuando está, como decimos los dominicanos,¨jartándose, jondeándose o ajebrándose ¨un viaje de espaguettis con patitas de cerdo, con mucha salsa y viene alguien a darle una charla sobre los carbohidratos y las grasas saturadas, !por Dios, lleve su dieta y deje de fastidiar…!
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