jueves, 18 de marzo de 2010

MUDANZA



Este mensaje lo recibí de Saray, una bella chica que siempre lee y comenta mi blog , no sé la razón por la cual me puse triste cuando lo lei, ella me dijo que también se sintió asi.


A fuerza de mudarme
he aprendido a no pegar
los muebles a los muros,
a no clavar muy hondo,
a atornillar sólo lo justo.

He aprendido a respetar las huellas
de los viejos inquilinos:
un clavo, una moldura,
una pequeña ménsula
que dejó en su lugar
aunque me estorben.

Algunas manchas las heredo
sin limpiarlas,
entro en la nueva casa
tratando de entender,
es más, viendo por dónde habré de irme

1 comentario:

Saray Acosta dijo...

Hoy lo he leido de nuevo y me hizo llorar.....Hay un mensaje mucho más grande en ese pequeño poema de lo que realmente estamos viendo en letras....Deberé reflexionar pero cuando este más calmada, ahora solo me invade un sentimiento de tristeza!!!

Saray

  ¿ANCIANA QUIÉN?   Hace unos días, pensando obtener una respuesta diferente, le pregunté a mi hija: ¿A partir de qué edad se considera ...